Este esquema tan simple y complejo a su vez, de Andrés Zuzunaga, me quedó clavado, lo tenía imantado en mi mente a todas horas, no paraba de darle vueltas. Supongo que ante tanta incomodidad de haber presenciado el derrumbamiento de todos los escenarios que tenía idealizados o que pensaba que eran para mí, no me quedaba otra que enfrentar mi propio vacío y mi